lunes, 28 de junio de 2010
viernes, 25 de junio de 2010
La verdad de las grullas
Si le pido al mundo que pare y me lleve, tomo un sonido del aire y lo dejo caer.
Y si la esperanza se agota al fin, cuando vuelva el río con sus manos nos reunirá.
Por eso todos nos estamos mirando. en un instante por decirlo así.
Tengo una razón para pensar en Dios y en mí.
Sin embargo el cielo se cruza y no se deja saber.
Algo que se fue, sin totalmente desaparecer.
Algo que es un destello que nos viene a llevar.
Por eso todos nos estamos buscando, es imposible sólo con la sed.
Por eso todos nos estamos buscando, es imposible sólo con la sed...
Te espero así, en la más fuerte luz.
Entre las hojas, o en el aire.
En la laguna, sin que aparezca el rey...
Ya no están aquí, como ayer, las cosas que perdimos.
Todo quedó atrás al despertar.
Bosque azul en la oscuridad.
Nada es imposible sin tu amor...
Es la organización de la selva incrustada entre las ciudades que avanzan hasta morir.
Por eso todos nos estamos alejando, en un momento por decirlo así.
Te espero así, en la más fuerte luz.
Entre las hojas, o en el aire. En la laguna, sin que aparezca el rey... Tu desilusión nació una noche de verano, y todo esto se rompe, a la vez, al despertar.
Bosque azul de la oscuridad...
Nada es imposible sin tu amor...
Queda una verdad que dicen las grullas: no te aventures más allá del
valle mortal.
Dicen que se juntan allí seres humanos para capturarse y hacerse todo tipo de mal.
Por eso todos nos estamos mirando, en un momento por decirlo así.
Por eso todos nos estamos
Y si la esperanza se agota al fin, cuando vuelva el río con sus manos nos reunirá.
Por eso todos nos estamos mirando. en un instante por decirlo así.
Tengo una razón para pensar en Dios y en mí.
Sin embargo el cielo se cruza y no se deja saber.
Algo que se fue, sin totalmente desaparecer.
Algo que es un destello que nos viene a llevar.
Por eso todos nos estamos buscando, es imposible sólo con la sed.
Por eso todos nos estamos buscando, es imposible sólo con la sed...
Te espero así, en la más fuerte luz.
Entre las hojas, o en el aire.
En la laguna, sin que aparezca el rey...
Ya no están aquí, como ayer, las cosas que perdimos.
Todo quedó atrás al despertar.
Bosque azul en la oscuridad.
Nada es imposible sin tu amor...
Es la organización de la selva incrustada entre las ciudades que avanzan hasta morir.
Por eso todos nos estamos alejando, en un momento por decirlo así.
Te espero así, en la más fuerte luz.
Entre las hojas, o en el aire. En la laguna, sin que aparezca el rey... Tu desilusión nació una noche de verano, y todo esto se rompe, a la vez, al despertar.
Bosque azul de la oscuridad...
Nada es imposible sin tu amor...
Queda una verdad que dicen las grullas: no te aventures más allá del
valle mortal.
Dicen que se juntan allí seres humanos para capturarse y hacerse todo tipo de mal.
Por eso todos nos estamos mirando, en un momento por decirlo así.
Por eso todos nos estamos
lunes, 21 de junio de 2010
Soñario II
Tenía los pies en el agua, el ruedo de la pollera se le babeaba al caminar.
Arboles confundídos se mezclaban con el viento suave, pero no era cualquier viento
Era una gran carcajada de todas las edades..
Paso su brazo por mi hombro.
_"Si ya se estas soñando, pero que lindo, Cari, no?"
Me desperté y con esa mezca de risa y llanto le dije que sí.
Y la sonrisa me acompaño por siempre.
Arboles confundídos se mezclaban con el viento suave, pero no era cualquier viento
Era una gran carcajada de todas las edades..
Paso su brazo por mi hombro.
_"Si ya se estas soñando, pero que lindo, Cari, no?"
Me desperté y con esa mezca de risa y llanto le dije que sí.
Y la sonrisa me acompaño por siempre.
Etiquetas:
Notas noctámbulas
sábado, 19 de junio de 2010
24 hs en Buenos Aires
Caminé desde Lavalle al 1200, creyendome el destino firme, tengo "trámites" que solucionar.
Me compré libros (una antología de Fernando Pesoa, un ensayo sobre fotografía y un libro de psicología / sociología sobre Resiliencia, muy interesante, supongo que necesitaré colaboración de la "Tucumana" para entender un par de cosas)
Me compré zapatos cómodos para que se hagan viejos rápido.
Esto equivale a dos sesiones de terapia, sumado a la confirmación de un cappuccino con el "Tiburón" que ya a esta altura es mi ángel de la guarda.
Pero tenia esa angustia puesta al que me importa en el cuerpo.
Y estas no ganas que me dan una bronca...
Me compré libros (una antología de Fernando Pesoa, un ensayo sobre fotografía y un libro de psicología / sociología sobre Resiliencia, muy interesante, supongo que necesitaré colaboración de la "Tucumana" para entender un par de cosas)
Me compré zapatos cómodos para que se hagan viejos rápido.
Esto equivale a dos sesiones de terapia, sumado a la confirmación de un cappuccino con el "Tiburón" que ya a esta altura es mi ángel de la guarda.
Pero tenia esa angustia puesta al que me importa en el cuerpo.
Y estas no ganas que me dan una bronca...
Etiquetas:
Bitácora de la vida nómade
martes, 15 de junio de 2010
No tiene nombre
Junte, todas las letras, y se me escurren entre estás manos tan pequeñas, el aire me pesa en el cuerpo, como los parpados amados, ceñidos de espanto y de sal.
Me persiguen estos ojitos negros, ahora tan solos.
Estos dedos se volvieron inútiles para buscar la frase fiel
que exorcice este sentir ,sin sentido.
Pero no la encuentro,
te me volviste torpe esta vez cuaderno.
Hasta la risa,hoy, me parece estúpida.
¡Silencio todos! ¡Silencio Todo!
¡Que ni un pájaro se atreva a desplegar las alas!
Infinita es la tristeza.
Me persiguen estos ojitos negros, ahora tan solos.
Estos dedos se volvieron inútiles para buscar la frase fiel
que exorcice este sentir ,sin sentido.
Pero no la encuentro,
te me volviste torpe esta vez cuaderno.
Hasta la risa,hoy, me parece estúpida.
¡Silencio todos! ¡Silencio Todo!
¡Que ni un pájaro se atreva a desplegar las alas!
Infinita es la tristeza.
miércoles, 9 de junio de 2010
martes, 8 de junio de 2010
Todo
Es que llego una fuerza que se volvió más que vital, y si llega hay que dejarla que avasalle, que tire abajo todo lo previsible y estructurado.
Lo cierto era la fiereza de lo incierto, abriéndose paso.
Llamas de fuego devoran los miedos, y no queda otra que arder.
Después de todo, ¿Qué mal puede hacer un poco de esperanzas?
Lo cierto era la fiereza de lo incierto, abriéndose paso.
Llamas de fuego devoran los miedos, y no queda otra que arder.
Después de todo, ¿Qué mal puede hacer un poco de esperanzas?
Etiquetas:
"...y metio música bajo este pulso"
sábado, 5 de junio de 2010
Hijas del viento
Invaden la sangre.
Huelen a plumas,
a carencia,
a llanto.
Pero tú alimentas al miedo
y a la soledad
como a dos animales pequeños
perdidos en el desierto.
Han venido
a incendiar la edad del sueño.
Un adiós es tu vida.
Pero tú te abrazas
como la serpiente loca de movimiento
que sólo se halla a sí misma
porque no hay nadie.
Tú lloras debajo de tu llanto,
tú abres el cofre de tus deseos
y eres más rica que la noche.
Pero haces tantas soledades
que las palabras se suicidan.
Huelen a plumas,
a carencia,
a llanto.
Pero tú alimentas al miedo
y a la soledad
como a dos animales pequeños
perdidos en el desierto.
Han venido
a incendiar la edad del sueño.
Un adiós es tu vida.
Pero tú te abrazas
como la serpiente loca de movimiento
que sólo se halla a sí misma
porque no hay nadie.
Tú lloras debajo de tu llanto,
tú abres el cofre de tus deseos
y eres más rica que la noche.
Pero haces tantas soledades
que las palabras se suicidan.
Etiquetas:
Me lo llevo puesto
martes, 1 de junio de 2010
El tiempo está después...
_ Cari, tomate un tiempo.
-¿Qué?
Me senté y miré fijo mis pantuflas que luchaban contra la gravedad para no suicidarse en esos 20 cm que nos separaban del frio cerámico, el cerámico tiene firuletes amarillos y un fondo rojizo y un gris trajinado de pisadas.
Debe ser algo así como, reinscribir fechas en el almanaque, intentar que un Enero no sea más "Enero" o que "Mayo" vuelva a ser el mes insípido que siempre fue, mucho antes de intentar que "el tiempo pase".
Quizás se trata de pasar por este bar, el cine, por otros labios, otros olores y que este tiempo sea tomado y pierda significancia.
Entonces comprendo la intención de sus palabras.
" Tomate un tiempo".
Se me dibuja una muequita bastante descreída, se viste de una esperanza que presume no hacerle mal a nadie...
Recuerdo ese dolor que paraliza, el estómago pegado en mi garganta, el aire luchando por circular, y desde un auto mirar la gente ir y venir...Y yo aquí.
Viendo el tiempo pasar.
Y están esas grandes alegrías, que vienen corriendo desde el fondo de la memoria y se estrellan en mi boca como una gran anécdota y chorrea la risa por mi cara.
Eso, que me vuelve afortunada más allá del tiempo.
Y todas esas cosas, esas son las que estoy mirando hoy.
Todas éstas que tengo aquí, al lado de este pie que baila ahora descalzo, luchando con el frio que me trepa como un bicho, que trato de espantar en vano.
Lo que el almanaque no se traga.
Mi tiempo no es del almanaque, viene de otro lugar.
Respirar.
Me levanto en busca de calor para estos pies helados.
Dejando que la memoria vuelva a ordenar lo que vino a decir.
Esta memoria mía, que une lo que no fue a lo que ya no es.
El tiempo está después
Liliana Herrero
-¿Qué?
Me senté y miré fijo mis pantuflas que luchaban contra la gravedad para no suicidarse en esos 20 cm que nos separaban del frio cerámico, el cerámico tiene firuletes amarillos y un fondo rojizo y un gris trajinado de pisadas.
Debe ser algo así como, reinscribir fechas en el almanaque, intentar que un Enero no sea más "Enero" o que "Mayo" vuelva a ser el mes insípido que siempre fue, mucho antes de intentar que "el tiempo pase".
Quizás se trata de pasar por este bar, el cine, por otros labios, otros olores y que este tiempo sea tomado y pierda significancia.
Entonces comprendo la intención de sus palabras.
" Tomate un tiempo".
Se me dibuja una muequita bastante descreída, se viste de una esperanza que presume no hacerle mal a nadie...
Recuerdo ese dolor que paraliza, el estómago pegado en mi garganta, el aire luchando por circular, y desde un auto mirar la gente ir y venir...Y yo aquí.
Viendo el tiempo pasar.
Y están esas grandes alegrías, que vienen corriendo desde el fondo de la memoria y se estrellan en mi boca como una gran anécdota y chorrea la risa por mi cara.
Eso, que me vuelve afortunada más allá del tiempo.
Y todas esas cosas, esas son las que estoy mirando hoy.
Todas éstas que tengo aquí, al lado de este pie que baila ahora descalzo, luchando con el frio que me trepa como un bicho, que trato de espantar en vano.
Lo que el almanaque no se traga.
Mi tiempo no es del almanaque, viene de otro lugar.
Respirar.
Me levanto en busca de calor para estos pies helados.
Dejando que la memoria vuelva a ordenar lo que vino a decir.
Esta memoria mía, que une lo que no fue a lo que ya no es.
El tiempo está después
Liliana Herrero
Suscribirse a:
Entradas (Atom)