jueves, 20 de octubre de 2011

triste

He buscado cada una de los durmientes, cada uno de los eslabones, que me acerquen , unan, afirmen a tu voz, desde mi esperar desolado,enojada, con vos por tu frio abrazador y por mi deshielo inminente.
Entre tu aliento y el mío se compone un ruído ensordecedor,alquitrán en los ojos, rigidéz de cementerio.
Camino de vuelta con mis durmientes y estos eslabones, sin saber muy bien que hacer, sin poder explicar nada, ni querer hacerlo.
Triste, infinitamente, triste.
Ojalá nunca caigas en el pozo del error,porque has azulejado las paredes y la caída sería terrible.
Yo me siento aquí en este cordon del camino a la espera de un rayo de luz que amortigüe tanto silencio por dentro, tantas cosas por decir y tanto por escuchar.
Pero no estoy presa de un rol de víctima,estoy presa de un enojo estéril, que se transforma en esta sensación de vacio y desilución del que cada vez es más difícil salir.

domingo, 8 de mayo de 2011

En la cuerda floja


Que si, pero mejor..
Una alforja de decisiones más o menos tomadas.
Incontables charlas entre amigos que en sintesis , dicen lo mismo.

Y aún pienso que hacer con lo que siento, con lo que no siento y con lo que alguna vez sentí..
Hacer algo.
Cómo si el sentir fuese una plastilina sin color, que estrujo entre los dedos de mi cabeza buscando la forma equilibrada que le permita subsistir.

Y esta angustia de verte llegar, y no.
Este no mirarte y saberte ahí.
De creerme en un lugar ,y no.

Me repito, hasta el hartazgo las miles de certezas, que dijimos la última vez.
¿ Cómo estaba tan segura? ¿Qué parte de mi fría y absoluta ordeno este mapa imposible de seguir?

Yo podría dejar ir las discusiones como ovillos de una lana vieja y anudada que simplemente se descarta.
Las fastidiosas discusiones,
que siempre derrumbo con un enorme silencio.
Silencio que lees como un "tenes razón" otorgado en laureles.
Y si, puedo dejar ir todo eso y más.
Pero este dolor puesto al que me importa en mi garganta...
Este capricho de extrañar
Desprenderse de lo malo es lo fácil
Quién se encarga de justificar la perdida de lo bueno?


sábado, 7 de mayo de 2011

De eso no se habla


En esta cúspide da lo mismo.
Bordeando trazos de un rumbo, un poco inventado un poco intuido como todo destino.
Manos llagadas por malezas de profundas y tercas raíces, ocultas.
La mirada es el horizonte.
Tibiezas sin refugio.
Trampas de oasis efímeros,
Cansancio.
¿Qué vieja sed vuelve hoy?
Arcilla del tiempo en manos de mancos,
Serán las huellas no habitadas que buscan su eco.
Desperdicios del sol.

domingo, 1 de mayo de 2011

Carta

Querido bebé:

Es la primera vez que te escribo, me preguntaba si podías escuchar mi voz, y la de papá.
Espero que si, decimos que te amamos todo el tiempo.
Papá siempre insiste en que su bebe tiene auriculares, y yo me preguntaba que música te haría escuchar por primera vez.
(dijeron que en esta semana tus oídos empiezan a funcionar)
Me decidí por esta canción, que a mi me gusta mucho.
Es una canción sencilla, como las mejores cosas en este mundo al que te traemos.
Por ahora las cosas están muy caóticas, aunque no recuerdo cuando no fue así.
Hay muchas cosas buenas por mostrarte y contarte, espero que la vida me de el tiempo necesario para hacerlo.
Te tocó el Norte, que no es poco, vas a aprender a quererlo y sobre todo a necesitarlo.
Vas a conocer las siestas, la fuerza del sol, y la forma del amor más pura , la amistad.
Vas a caminar las mismas calles que mamá y papá, y te vamos a llevar a conocer otras.
Sospecho que siempre querrás volver, o por lo menos eso esperaré siempre.
Nada es fácil por aquí, pero la vida es una bendición .
Y no sabes las ganas de hacerte upa que ya tengo,
por ahora canto despacito para vos.
Soñando escucharte.
Te amo
Mamá



Serenata para la tierra de uno

(María Elena Walsh)

Porque me duele si me quedo
pero me muero si me voy.
Por todo y a pesar de todo, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

Por tu decencia de vidala
y por tu escándalo de sol,
por tu verano con jazmines, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

Porque el idioma de infancia
es un secreto entre los dos.
Porque le diste reparo
al desarraigo de mi corazón.

Por tus antiguas rebeldías
y por la edad de tu dolor,
por tu esperanza interminable, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

Para sembrarte de guitarra,
para cuidarte en cada flor,
y odiar a los que te castigan, mi amor,
yo quiero vivir en vos.