lunes, 7 de diciembre de 2009

Necesito una hondera..

Me gustaría tardes como las de hoy ,tener ocho años , irme con Álvaro y los demás primos al dique Los Tres Tubos , a pescar mojarras y dejarme fascinar con la perfección innata de los niños a la hora de elegir piedras .
Armas letales , las hondas, se desplegaban con habilidad y exactitud sobre los blancos dejandolos,totalmente desplomados..

Esa es la sensación con la que empiezo esta semana.
Quisiera tener la buena puntería del primo Javier.

Ver bajar estrepitosamente
La desidia mezclada con el orgullo de ser miembro del hospital público ( esto vuelve impune a la vagancia propiamente dicha)
La mediocridad de hacer para parecer, de la ciencia por el pedestal, el orgullo de pertenecer a cualquier precio.

Un hondazo en medio de la frente al que se caga en el esfuerzo del otro, y uso la palabra "cagar", fea, gráfica, desagradable y poco femenina.
En el cuaderno pocas veces me dibujo enojada, pero hoy será la excepción que confirma la regla.
Es bien sabido que el enojo es un medio, no un fin en si mismo.

2 comentarios:

Cari dijo...

Unos de mis talentos menos preciados es hacer cosas extrañas con mi pc... nose como un comentario quedo como entrada ¿?
ac dijo...
Pero para que perder el tiempo en el que no lo vale, no te das cuenta que cuantos mas mediocres mas alto es el lugar que ocupas...
El mediocre con sus infamias, sus chusmerios, su incapacidades y frustraciones se evidencia enseguida no hace falta perder el tiempo en el.
Solo hay que tener la habilidad en la vida de encontrar gente con distintas habilidades y seguir adelante...No entiendo el enojo, si por cada inutil ejecutivo e incapaz emocional nos vamos a enojar, nos preocupamos, nos olvidamos de vivir.
La diferencia se hace sola....

Cari dijo...

"nos olvidamos de vivir, la diferencia se hace sola.."
No se si se hace sola, pero si termina moldeandonos como el mejor artesano a la arcilla,esta en nosotros que ese barro se vuelva firme vasija.
Sensei, como siempre , le pertenezco!